Estrategias Emergentes: Alternativas de Trump para sobrellevar sus obligaciones financieras

En una decisión reciente, un juez de la corte de apelaciones de Nueva York rechazó otorgar a Trump una extensión de tiempo para abonar una sentencia civil de US$ 454 millones por un caso de fraude. Mientras tanto, un juez federal está a punto de pronunciarse sobre la solicitud de Trump para retrasar o reducir el monto de la sentencia de US$ 83,3 millones en un caso de difamación presentado por E. Jean Carroll.

El enfrentamiento legal de la semana pasada subraya los desafíos financieros que Trump enfrenta al acumular sentencias combinadas que superan los US$ 537 millones. Ante estas obligaciones, los abogados de Trump han indicado que satisfacer estas sumas podría requerir un desembolso adicional de US$ 104 millones en concepto de honorarios legales. Asimismo, han planteado la posibilidad de que Trump se vea obligado a liquidar algunas de sus propiedades de forma urgente, recurrir a los mercados de capitales o encontrar nuevas fuentes de financiamiento.

Expertos legales han señalado que esta crisis de liquidez contradice la imagen tradicionalmente proyectada por Trump como un exitoso empresario con amplios recursos financieros y una habilidad innata para superar desafíos legales y financieros. Este panorama podría dejar a Trump endeudado con entidades financieras, donantes u otras fuentes de capital, particularmente en medio de las incertidumbres relacionadas con su posible candidatura presidencial en 2024 y las cuatro acusaciones penales que enfrenta.

Las opciones disponibles para Trump son limitadas. A pesar de haber declarado poseer más de US$ 400 millones en efectivo el año pasado, parte de sus activos significativos, como su participación del 30% en una sociedad con Vornado, están poco líquidos. A esto se suma la reticencia de los grandes prestamistas a ofrecer financiamiento a Trump, con instituciones como Deutsche Bank y Signature Bank poniendo fin a sus relaciones comerciales con él.

En este escenario, Trump podría considerar vender algunas de sus propiedades, aunque esto podría implicar desafíos significativos debido a las hipotecas existentes y la posible depreciación de sus activos. Alternativamente, podría buscar obtener fianzas, aunque la magnitud de las sumas en cuestión hace que este proceso sea complejo y poco común para individuos.

Independientemente de la estrategia que elija Trump, está claro que enfrenta un panorama financiero desafiante que pone a prueba su capacidad para cumplir con sus obligaciones legales y mantener su imagen de éxito empresarial.